¿Vino sin alcohol? Sí, leíste bien.
Puede sonar contradictorio, pero los vinos sin alcohol existen… y cada vez más personas los eligen. Por salud, por estilo de vida o simplemente por curiosidad, esta tendencia pisa fuerte en todo el mundo, y Argentina no se queda atrás.
En este artículo, te contamos qué son y cómo se elaboran.
¿Qué es un vino sin alcohol?
Un vino sin alcohol es, en esencia, un vino “de verdad” al que se le ha quitado el alcohol luego de su fermentación. Es decir, no es un jugo de uva ni una imitación: pasa por los mismos procesos de vinificación, solo que al final se aplica una técnica especial para extraer el alcohol.
¿Cómo se elabora?
El proceso más habitual es la desalcoholización al vacío o por ósmosis inversa, donde se separan los componentes del vino (aromas, color, alcohol, etc.) y luego se reencapsulan sin el alcohol.
Así, se conservan muchas de las características originales del vino, aunque es cierto que el resultado final es más liviano y menos estructurado.
¿Por qué elegirlo?
Hay muchas razones por las cuales alguien puede elegir un vino sin alcohol:
- Porque no puede o no quiere consumir alcohol (embarazo, salud, medicación).
- Porque quiere disfrutar del ritual del vino sin los efectos del alcohol.
- Porque busca una opción para momentos en los que tomar alcohol no es lo ideal (por ejemplo, durante el día o antes de manejar).
- Porque está explorando nuevos hábitos y formas de disfrutar.
¿A qué sabe un vino sin alcohol?
No vamos a mentirte: no es lo mismo. Pero eso no significa que no sea rico.
Los vinos sin alcohol tienen cuerpo más ligero, menos persistencia en boca, pero conservan aromas frutales, acidez y, si están bien hechos, una experiencia más que interesante. Cada año, la calidad mejora y aparecen propuestas más sofisticadas.
¿Existen vinos sin alcohol argentinos?
Existen algunas opciones con bajo alcohol pero no son muchas las bodegas que están experimentando esta alternativa.
Aunque en Vinovadores todavía no trabajamos con vinos sin alcohol, seguimos de cerca esta tendencia y no descartamos sumar etiquetas de calidad que representen esta nueva forma de vivir el vino.